Alumnos de la Escuela de Madrid ganan el VII Concurso para Estudiantes de Arquitectura convocado por la firma de equipamiento de oficinas Steelcase
David Quesada
A la hora de pensar en un espacio de trabajo ideal, tan estimulante puede ser la visión de un creador consagrado como de los jóvenes cachorros de la arquitectura. Sin las ataduras del compromiso comercial o las especificaciones físicas de un lugar concreto, su ingenio puede arrojar ideas interesantes que contribuyan a la innovación en este ámbito.
Así lo ha entendido la multinacional Steelcase, especializada en el equipamiento y la optimización de espacios de trabajo, al promover su Concurso para Estudiantes de Arquitectura, que caba de celebrar su séptima edición. El reto de esta convocatoria consistía en crear un espacio de trabajo diseñado para los líderes de una organización, que respondiera a las necesidades cambiantes de cada momento en función de las tareas a desempeñar. Al concurso se han presentado un total de 20 proyectos en los que han participado 120 estudiantes de 20 universidades de España y 9 de Portugal.
El proyecto ganador FlipTop Satélite Network, premiado con 3.000 euros, ha recaído en tres estudiantes de 4º curso de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid. En su trabajo, los alumnos han tratado de dar respuesta a todas las situaciones que transcurren a lo largo de la jornada laboral de un CEO en un espacio de trabajo. Para solucionarlo han creado un sistema de generación de espacios compuesto de un falso techo que, al descender, modela diferentes zonas de trabajo; así como de un mobiliario móvil al que se adosa un sensor Wifi que proyecta a su alrededor un espacio virtual.
El segundo premio, dotado con 2.000 euros, ha ido a parar a dos alumnos de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid por su trabajo “El semillero”. En este proyecto, los estudiantes han creado 5 espacios que se adaptan a las necesidades que los directivos tienen a lo largo del día (reuniones, trabajo de concentración, zona de descanso, espacio de interacción y área de inspiración), que están interconectados entre sí mediante plantas, las cuáles permiten ajustar las zonas a los constantes cambios que se producen a lo largo de la jornada.
El tercer premio, galardonado con 1.000 euros, ha sido concedido a tres alumnos de Master de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Valencia por su trabajo “Hex-ecutive”. Basándose en un panal de abejas, los estudiantes proponen una estructura de módulos que pueden aumentar o disminuir en función de las necesidades del momento. Cada módulo está formado por una estructura metálica de base hexagonal a la que se le adosan planos de madera que crear diferentes espacios. Estas superficies pueden ser fijas o abatibles y conforman parte del mobiliario y la composición de las atmósferas.